jueves, 27 de noviembre de 2014

SEMBRADORES DE ESTRELLAS

La Navidad es el momento para que los niños se conviertan en Misioneros, gracias a Sembradores de Estrellas, invitamos a todos aquellos que nos siguen a que se animen a vivir esta campaña en sus Parroquias y colegios. Se trata de una acción muy sencilla y los niños lo pasan muy bien, no se regala una estrella se siembra, sembrar estrellas es poner Luz en un mundo en el que pasamos junto a los otros sin apenas mirarnos. Jesús esta deseando llenar de alegría este mundo. Queremos que esta sea una Navidad Misionera. En nombre de los misioneros iremos felicitando la navidad a la gente por la calle de nuestras ciudades y pueblos y poniendo una nota musical con nuestros villancicos.
Nos hemos dado cuenta que los niños que participáis en esta campaña de Sembradores de estrellas, tenéis un corazón generoso y solidario, por tanto os invitamos a que tras sembrar vuestras estrellas con tanta alegría, os llevéis a casa una hucha para compartir y os comprometáis como misioneros que somos a vivir una navidad diferente y mas solidaria, llenando nuestra hucha con gestos generosos, para luego entregarlas en la Jornada de la Infancia Misionera.

Sería conveniente que a partir del sábado 13 de Diciembre pudiéramos hacer el envío en todos los lugares en los que salgamos a la calle a felicitar estas Navidades.
Las Parroquias, los colegios o grupo de niños de Acción Católica que vayan a participar deberán solicitar el material en esta Delegación de Misiones en la Calle del Rosal Nª 63 Bajo de Oviedo, llamando al teléfono 985204277; o bien a traves de email a: misiones@iglesiadeasturias.org y misiones2@iglesiadeasturias.org
Nos gustaría que nos enviaseis algunas fotos de vuestra actividad, las cuales publicaríamos en nuestro blog o Facetbook.
Gracias de antemano por vuestra implicación en esta actividad.
Atentamente en Cristo
Pedro Tardón

Delegado de Misiones 

martes, 25 de noviembre de 2014

Revista MISIONEROS

“MISIONEROS” DESENTRAÑA EL AUGE DEL YIHADISMO

El mundo del islam es un caos actualmente. Durante varias décadas, su discurso en muchas mezquitas, medios de comunicación y escuelas ha alimentado la violencia.  Siria, Irak, Nigeria, Sudán, Somalia, Egipto… la están sufriendo en nuestros días. Pero, ¿a qué se debe este auge del yihadismo que indigna a los propios musulmanes y que acaba también asesinándolos a miles? A esta pregunta y a otras muchas relacionadas con este asunto trata de responder la revista Misioneros Tercer Milenio del mes de noviembre en un reportaje que, bajo el título “Yijadismo, la enfermedad del islam”, recoge la sección “Iglesia a fondo”. “La guerra que están llevando a cabo en nombre del islam es –señala su autor, el padre blanco Agustín Arteche- la perversión de los valores religiosos y la negación de los derechos humanos más fundamentales”.
 
Con motivo de la celebración de la primera fase del Sínodo de los Obispos sobre “Los desafíos pastorales de la familia en el contexto de la evangelización”, la revista Misioneros Tercer Milenio también se ha preocupado de destacar y analizar en sus páginas centrales los problemas que afectan a esta célula básica de nuestras sociedades en los países de misión. En estos lugares la pobreza, la emigración y la violencia son las tres grandes amenazas a las que los hogares se han de enfrentar.

Otros temas que se abordan en el número de noviembre de esta publicación son las recientes elecciones presidenciales celebradas en Mozambique, así como una interesante entrevista al misionero comboniano y obispo de Bangassou (República Centroafricana), Juan José Aguirre, quien subraya: “La Iglesia es siempre la última en apagar la luz”. En las páginas de Cultura se aborda el problema de los “Niños acusados de brujería”, tratado en el documental Yo no soy bruja.



jueves, 6 de noviembre de 2014

CONCURSO DE CUENTOS DE INFANCIA MISIONERA.


El Secretariado Nacional de Infancia Misionera convoca el Concurso de Cuentos “Yo soy uno de ellos” para la Jornada de Infancia Misionera 2015

El tema de los cuentos será “Yo soy uno de ellos”, en referencia a cómo vive el niño el espíritu de Infancia Misionera. A los participantes les puede ayudar a inspirarse la lectura de la revista Gesto, n.º 172, y del “Decálogo del niño misionero”, publicado en ese número especial, dedicado a la Obra Pontificia de la Infancia Misionera. También les puede ayudar la lectura del tema 27 del Catecismo de la Conferencia Episcopal Española “Jesús es el Señor”.

Podrán presentarse niños de edades entre 6 y 12 años.

La presentación de los cuentos se hará en la Delegación Diocesana de Misiones correspondiente, y tendrá como fecha límite el 30 de noviembre de 2014.

El concurso se desarrollará en dos fases: diocesana y nacional.

En cada diócesis, un jurado propio elegirá dos finalistas, que recibirán un diploma de la Secretaría General de Infancia Misionera y pasarán a participar automáticamente en la fase nacional. Para ello, las Delegaciones de Misiones enviarán los dos cuentos finalistas a la Dirección Nacional de OMP antes del 31 de diciembre de 2014.

En la fase nacional, un jurado compuesto por cinco miembros elegirá, de entre todos los finalistas, el cuento ganador del Premio del Concurso de Cuentos de Infancia Misionera, cuyo autor recibirá un ordenador personal y verá publicada su obra en la revista Gesto.

Asimismo, este jurado otorgará dos Menciones Especiales a sendos cuentos, cuyos autores serán premiados con un e-book.

Para descargar las bases y toda la información del concurso: 


lunes, 3 de noviembre de 2014

sábado, 1 de noviembre de 2014

EXPERIENCIA MISIONERA DE NUESTROS DIÁCONOS

César Gustavo Acuña, uno de los diáconos de nuestra Diócesis, escribe este testimonio y esta oración en estos primeros días de su experiencia misionera en Benin. 
Hacemos nuestra su oración y su bendición. 


Donde los gritos de auxilio nos son escuchados y las necesidades se transforman en un detalle más de la vida, permanece cada vez más brillante la Gracia de Dios que nos ilumina. 

En todo momento Cristo nos regala una bendición escondida en los más pobres, en esta gente que sonríe sinceramente a los problemas de la vida y a las difíciles circunstancias. 

Poder ser partícipe de este pedacito de cielo me ayuda a comprender que muy poco necesitamos para ser felices, sólo Dios puede llenar verdaderamente los corazones, sólo él puede hacernos felices y buenos. 


Padre Santo, regálame un corazón desprendido que sepa aceptar tu voluntad en todo momento, dame la gracia de poder acoger a los más necesitados y de serte siempre fiel. 
Gracias porque estás siempre sorprendiéndonos en los pequeños detalles. 
María, qué sería de nuestras vidas sin tu cuidado de madre. Acoge nuestras suplicas y ofrécelas al Padre como ofrendas de amor. 
Bendito sea Dios por el don de la vida, por el don de la fe y por tu infinita misericordia.