miércoles, 30 de abril de 2025

ALFONSO POMBO NOS FELICITA LAS PASCUAS DESDE LA AMAZONIA PERUANA

 Queridos amigos de la Delegación de Misiones de Oviedo:


Una vez más me asomo por aquí para comentaros sobre nuestra actividad en el puesto de misión de Tacsha Curaray, a orillas del río Napo, en plena Amazonía peruana.

Estas últimas semanas han sido muy intensas a nivel pastoral. Del 10 al 14 de abril tuvimos nuestro primer encuentro de agentes de pastoral. Era el primero que se hacía tras 13 años de ausencia de misioneros en el puesto. Este encuentro pretende reunir a los agentes de pastoral de todas las comunidades que abarca el puesto para estrechar lazos, profundizar en la formación de los agentes, conocer sus inquietudes, etc.

De las 27 comunidades que conforman el puesto, acudieron 9. Esto nos da una idea del enorme trabajo que nos queda por delante. Han sido muchos años de abandono por falta de misioneros y hacer que todo vuelva a funcionar va a llevar tiempo y mucha paciencia.

A pesar de todo, el encuentro resultó muy positivo. Contamos con la presencia del CAAAP, una institución creada por los vicariatos de la selva del Perú para trabajar por los derechos humanos y la defensa del territorio en esta zona tan olvidada por todos. También nos acompañó nuestro vicario general, César Caro, que nos dio una visión global del vicariato.

El encuentro finalizó con la socialización de las fechas para nuestra primera visita del año a las comunidades. A mediados de mayo estaremos surcando el río Napo para llegar a estos pueblos tan necesitados de la Palabra de Dios. Fortaleciendo a los agentes de pastoral y creando lazos de amistad y confianza, esperamos que poco a poco la vida de fe en estas comunidades vaya resurgiendo.

Una vez terminado el encuentro y casi sin tiempo para descansar, comenzamos la Semana Santa, acompañados con el padre César que se quedó para hacer ese servicio al puesto de misión. Fueron días muy entrañables de compartir con la comunidad los principales días para nuestra fe. Celebraciones sencillas pero muy sentidas. En estos lugares se viven muy de cerca las cruces del mundo, pero también las ganas de superar una realidad tan difícil e injusta.

Como podéis comprobar nuestra labor misionera es fundamentalmente hacer presencia de Iglesia en medio de esta tierra tan remota. Una presencia sencilla, sin grandes pretensiones. Estando aquí pienso mucho en el hermano Carlos de Foucauld y su apostolado de la amistad. Así me gustaría que nos recordara esta gente, como personas que vinieron y se hicieron amigos de los pobladores de las comunidades.

Queridos amigos, me despido ya de vosotros sin antes desearon una feliz Pascua de Resurrección.

Un abrazo fraterno

Alfonso