lunes, 18 de abril de 2016

La infancia canta por un mundo justo

Publicado por La Nueva España-17 de abril 2016

El Festival de la canción misionera reunió en Oviedo a 250 niños que lanzaron emotivos mensajes musicales a favor de la paz y la acogida a los refugiados


Fotos:Oviedo.IRMA COLLÍN
Oviedo, Ana Paz PAREDES "Cuando veo a ese niño que no lo logra, / cuando veo a ese padre que lo añora, / cuando veo a mis vecinos ignorarlos, siento vergüenza, / quiero arreglarlo. / Quiero acoger a la familia que me trae el mar, / quiero acoger al niño que duerme en el barro, / quiero que sienta el calor de mis abrazos, / quiero ser misionero como tú, / misionero como tú". Ésta es parte de la letra de uno de los temas que levantó grandes aplausos entre quienes ayer acudieron a disfrutar del Festival de la canción misionera, que por primera vez en sus diez años se celebró en Oviedo. Concretamente en las dependencias del colegio de las Teresianas. El tema, interpretado por los niños del coro "Shemá", de Avilés, se hizo merecedor del premio a la mejor letra original. Allí, con ellos, algunos padres portaban mensajes alusivos a la situación de los refugiados sirios, a su vez interpretados, en escena, por varios niños de este coro.
Martina González, de la organización, señaló que el festival se celebraba en el Corazón de María de Gijón, pero, dado el notable incremento de participantes, este año tuvieron que buscar un local más amplio para darles cabida a todos y así se habilitó como escenario la zona deportiva del colegio de las Teresianas en Oviedo.

Unos 250 niños y niñas sorprendieron al público con sus interpretaciones, su originalidad, las coreografías, el mensaje de sus textos, su frescura y sus proclamas en defensa de la paz, del amor fraterno y del trabajo que los misioneros desarrollan en el mundo. La letra era de creación propia, así como las coreografías que aún enriquecieron más las verdades que cantaron estos niños. Todos brillaron con luz propia y llevaron, con admirable maestría, su mensaje a los adultos.
Impactante fue sin duda la actuación de los niños de la parroquia de Santa María de Noreña, que se hicieron dignos merecedores del premio a la mejor interpretación. Los siguientes premios fueron: parroquia de San Pedro de Gijón, mejor vestuario; colegio la Milagrosa de Oviedo, mayor entusiasmo; colegio de la Asunción de Gijón, premio al espíritu misionero; coro "Shemá", de Avilés, mejor letra original; Patronato San José de Gijón, mejor coreografía; el centro Don Orione, Posada de Llanera, mejor música; parroquia Nuestra Señora del Carmen de Mieres, mejor canción; colegio Corazón de María de Gijón, mayor compromiso, y Colegio Nuestra Señora del Buen Consejo de Avilés, premio al grupo revelación.