“Hay que soñar para seguir viviendo con ilusión”
OMPRESS-MADAGASCAR (4-01-17)
La misionera asturiana Alegría Fernández, escribe desde Madagascar, deseando a todos una feliz Navidad y un feliz año 2017. Además explica cómo han sido los últimos días en el Centro de promoción Femenino que acoge a muchas jóvenes sin recursos en la misión de las Maristas Misioneras de Ambositra. Madagascar está en el hemisferio sur y las vacaciones de verano coinciden con nuestro invierno.
“Llega el tiempo de Navidad que cada uno celebra según sus costumbres, creencias o tradiciones… Pero todos coincidimos y deseamos que en este tiempo reine la alegría, la fraternidad y la PAZ. Que el mundo entero sea, como dice el Papa Francisco, ‘LA CASA DE TODOS’. ¡FELIZ NAVIDAD! A todos, familias, amigas, amigos, conocidos y a los que no conozco. A los que juntos, hacemos que ‘brillen los ojos’ de los niños, de los pobres, de los enfermos y de los que se portan bien. Una gota de agua con sabor a eternidad… Feliz Año 2017 a todos.
El Centro de Promoción Femenino sigue adelante con buenos resultados. Todas las alumnas de segundo año aprobaron los exámenes (17). Es la primera vez con tan buen resultado. Esto anima a las demás alumnas y también a las educadoras. Cada año nos sorprende la cantidad de inscripciones que se presentan a principio de curso. Después de completar nuestra lista de nuevas alumnas, siempre se forma una lista de espera, con la expectativa de que alguna desista.
Es el segundo año que se celebra la fiesta del Centro de Promoción Femenino Francisca Peroton, 15 de octubre, día aniversario en el que Francisca embarcó para Oceanía en el año 1845. Esta mujer fue la primera misionera en Oceanía. Después de unos años otras jóvenes siguieron su ejemplo y poco a poco se formó un gran grupo que hoy forma la Congregación de las Hermanas Misioneras de la Sociedad de María. La celebración fue animada y muy fraterna. Una misa preparada y cantada por las alumnas en malgache pero también en inglés y francés. Al final la entrega de los Certificados de Fin de Estudios a las 17 jóvenes, en presencia de sus padres o miembros de sus familias. Toda la ceremonia fue retransmitida en directo por Radio María. Gran honor para nuestra pequeña escuela dedicada a la formación de jóvenes sin recursos, para las que ir adelante en la vida no será nada fácil. La fiesta se terminó con una breve presentación de la Congregación a las alumnas y familias, una bonita animación presentada por cada clase y la comida fraternalmente compartida. Y… ¡que el año próximo nos traiga más alegría!
Este año hemos seguido mejorando las condiciones de trabajo en la escuela. Se compraron tres nuevas máquinas de coser, telas de calidad para las alumnas que desean perfeccionarse en corte y confección.
Durante las vacaciones hubo que arreglar el techo de la escuela. Cubrir unas cuantas goteras y, sobre todo, darle dos buenas manos de pintura. Esperemos que aguante unos cuantos años más. Los próximos arreglos, porque nunca se acaban, serán las ventanas que ya no resisten las grandes lluvias dejando entrar el agua y también el frío. También hablamos muy a menudo de hacer una vitrina grande para exponer los trabajos de las alumnas: bordados, ganchillo, confección… Toda clase de labores, y dar a conocer de una manera clara lo que se aprende en la escuela. Hay que soñar para seguir viviendo con ilusión.
También dan satisfacción los niños apadrinados. Las notas de este primer trimestre son muy buenas en general. Son niños admirables. Muchos de ellos viven en una sola habitación, sin luz eléctrica, donde se come, se duerme, donde se convive con mayores y niños pequeños. ¿Cómo hacen para estudiar?
Nuestra asistenta social sigue visitando familias y no le faltan sorpresas. Hace unos días ha tenido una gran alegría al visitar una familia a la que había ayudado a la reparación de la casa que se venía abajo y peligraba de derrumbarse. No solamente el trabajo de reconstrucción está terminado, si no que hay arreglos: compartimentos y divisiones al interior, delimitando la parte dormitorio, cocina y gallinas. Buena organización que mejora considerablemente la higiene de vida. Siguen sin tener luz eléctrica, ni agua. Ni armarios, ni sillas ni muebles de ninguna clase, si, una cama hecha con madera de recuperación. Cuestión de no dejar los niños dormir en el suelo. Pero nada que ver con lo que fue la vida es esta familia. Pobre pero limpio. ¡Gracias!
Otra novedad es la llegada de una nueva compañera a la comunidad. Es malgache y será parte del equipo de catequistas de la parroquia. Un trabajo que no hemos podido realizar hasta ahora por falta de personal. Hay unos trescientos niños que se preparan para la primera comunión. Si contamos los más pequeños y los mayores rondamos fácilmente los mil. Se necesita gente y es una gran alegría para nosotras el poner nuestro grano de arena.
El cuidado de los enfermos sigue de actualidad y solidaridad con las familias del barrio también. Con la llegada de las fiestas ya pensamos en la ‘fiesta con los pobres’ que será el 11 de diciembre. Con un poco de anticipación, pero creo que lo principal es que se sientan que ellos también cuentan. Tendrían que ser siempre los primeros.
Gracias por estar ahí también con nosotras apoyándonos con vuestro afecto, recuerdo, oraciones y con toda la ayuda que sea posible.
Felices fiestas… Que reine la alegría, la paz y todas las cosas buenas de las que somos capaces. Con mucho afecto y agradecimiento”.
