viernes, 21 de octubre de 2022

“Cuando amas y te dejas llevar, descubres que en los pobres está Dios”

 NOTICIAS


Arzobispado de Oviedo-Medios de comunicación-Publicado el 21/10/2022
“Cuando amas y te dejas llevar, descubres que en los pobres está Dios”

Este domingo, 23 de octubre, se celebra el DOMUND (Domingo Mundial de las Misiones), con el lema “Seréis mis testigos”. Es el día en el que toda la Iglesia reza especialmente por la causa misionera, y organiza una colecta para colaborar con ella. Es, asimismo, la oportunidad de colaborar con el Papa en el sostenimiento de la misión de la Iglesia en los 1.117 territorios de Misión. 

Esta labor se hace en la Iglesia a través de las Obras Misionales Pontificias, que este año 2022 celebra los 200 años de su fundación, y también es el año de la beatificación de su fundadora, Pauline Jaricot. 

La labor de la Iglesia en los 1.117 territorios de misión es ingente. Lo demuestra el hecho de que cerca de la mitad de las escuelas que la Iglesia católica dirige se encuentran en estos territorios, y lo mismo sucede con el 30% de sus instituciones sociales, como hospitales u orfanatos. En los últimos treinta años, la Iglesia ha abierto en las misiones 21.092 instituciones sociales y 72.295 instituciones educativas. Para hacerse una idea de su magnitud, es como hubiera abierto 2 instituciones sociales y 6 instituciones educativas al día.

Por eso es fundamental participar activamente en la misión, no solo con un donativo, sino con la oración y con el tiempo, porque en España, por ejemplo, hay 1.689 voluntarios en las Delegaciones diocesanas de misiones y en las parroquias, trabajando en la sensibilidad misionera, y cada año desde España se calcula que unas 10.000 personas, especialmente joven, dedican sus vacaciones a vivir una experiencia misionera, hecho que en muchos casos se convierte en un voluntariado recurrente, de mayor duración.

El Domund en nuestra diócesis

El pasado miércoles se presentaba, ante los medios de comunicación asturianos, la campaña del Domund en nuestra diócesis. En la presentación, que tuvo lugar en la sede de la Delegación de Misiones, participaron el Delegado episcopal, Pedro Tardón la misionera Pilar Bobes, de la congregación Hijas de María Madre de la Iglesia y el misionero Comboniano Ramón Pascual. 

En su intervención, el Delegado episcopal de Misiones anunció que nuestra diócesis había sido una de las más generosas en la colecta del año pasado, donde se recaudaron 364.808,64 euros, entre parroquias, colegios y otras instituciones. Hay, además, 126 misioneros asturianos repartidos por 40 países del mundo, de los cuales 70 son mujeres y la mayor parte se encuentran en el continente americano.

En este continente desarrolló la mayor parte de su labor pastoral como misionero el religioso Ramón Pascual, natural de Valencia, quien tras una experiencia de diez años en la República Centroafricana, fue enviado a México, y también a América central, primero Nicaragua y después Guatemala, donde ha permanecido los últimos trece años.

La hermana Pilar Bobes es asturiana, natural de Noreña, y vivió en México y Colombia, aunque su último destino fue Mozambique, de donde regresó, para su jubilación, hace tan solo unos meses. Allí vivió en una comunidad situada en una zona muy aislada de toda población y de cualquier servicio mínimo, con lo que tuvo que “aprender a vivir de nuevo, dándote cuenta de dónde estás, de a qué has ido y eso te hace ir a lo esencial: hay que trascender, no mirar solamente a lo inmediato, sino amar y dejarte llevar. Cuando haces esto –afirma– entonces ves que son ellos los que te llevan a ti, porque descubres que en los pobres está Dios, y allí lo palpas muy fuertemente. Palpas a Dios, que está contigo, a través de ellos”.

Allí la comunidad, entre otras actividades, dirigía una pequeña escuela para niños pequeños, a los que las religiosas acogían para permitir que sus madres pudieran ir a trabajar. “Allí el niño no cuenta para nada –afirma–. El niño tiene que trabajar, ir al río, traer leña, cuidar de su hermanito, y no puede jugar, no puede ser niño. Eso nos motivó –dice– para crear esta escuela. Allí los niños toman un desayuno, porque llegan sin haber comido nada, y antes de marchar les damos su almuerzo, para que, hasta las cinco de la tarde que llega su mamá del campo, tengan su tripita llena. Allí aprenden portugués, a jugar con normas establecidas, etc”.  Además de esta actividad, las hermanas visitan las diferentes comunidades de la zona a las que pertenece la parroquia, cuidan de los enfermos, dan catequesis y sobre todo, “están”: “Llegué a aprender palabras en Changana, el dialecto, y también hablo “portuñol”, como decimos allí; pero para las catequesis, por ejemplo, necesitamos un traductor. Así nos comunicamos con las once comunidades alejadas del núcleo donde nosotros estamos, que es la parroquia: hay que ayudarles, evangelizarles, hacer acto de presencia para que sepan que no están solos, que hay allí unos padres y unas hermanas que los quieren, que vinimos a vivir con ellos, a sufrir, cuando hay que sufrir, a reír, cuando hay que reír”.  

La misión de la Iglesia, en cifras

• Hay 1.117 diócesis consideradas territorio de misión. Son, en total, un tercio de las diócesis de la Iglesia universal. En ellas se celebra uno de cada tres bautismos del mundo. 

• Esos territorios de misión ocupan el 37,67% de la superficie de la tierra, y en ellos vive el 40% de la población mundial.

• En Europa no quedan territorios de misión. En África, hay 518, seguida de Asia, con 481. En América, 72 y en Oceanía, 46. 

• El último territorio de misión constituido es la diócesis de Tshilomba, en el sureste de la República Democrática del Congo, creada por el Papa el pasado 25 de marzo.

• Cerca de la mitad de las escuelas de la Iglesia católica, y el 30% de sus instituciones sociales –hospitales, orfanatos, residencias– se encuentran en misiones.

• En los últimos 30 años, la Iglesia ha abierto en las misiones 21.092 instituciones sociales y 72.295 instituciones educativas. 

miércoles, 19 de octubre de 2022

Se presenta en Asturias la Campaña del Domund 2022

 


Arzobispado de Oviedo-Medios de comunicación-Publicado el 19/10/2022
Se presenta en Asturias la Campaña del Domund 2022

La sede de la Delegación episcopal de Misiones, en la calle Rosal de Oviedo, acogió esta mañana la presentación oficial en Asturias de la Campaña del Domund 2022, que este año tiene como lema «Seréis mis testigos». Dirigida por el Delegado, Pedro Tardón, contó con la participación del misionero Comboniano Ramón Pascual y la religiosa Hija de María Madre de la Iglesia, Pilar Bobes.

El Delegado episcopal de Misiones presentó las cifras resultantes de la campaña del Domund del pasado año en la diócesis, donde se recaudaron 364.808,24 euros, agradeció la generosidad de los asturianos y añadió que a pesar del parón generado por la pandemia, este año se observaba un repunte en la participación y también en la organización de actividades para recaudar fondos para las misiones.

Nuestra diócesis cuenta con 126 misioneros asturianos repartidos por 40 países del mundo.

El Domund se celebra de manera especial este domingo, día 23, aunque toda esta semana se está realizando la animación misionera por colegios y parroquias de la diócesis. Además, este sábado a las 21 h en la parroquia de Begoña de los PP. Carmelitas de Gijón tendrá lugar la Vigilia del Domund.

Vídeo completo de la Rueda de Prensa:

lunes, 17 de octubre de 2022

El milagro de la solidaridad - P.Miguel Angel Güllon

 

Nos acaba de llegar desde El Seibo en República Dominicana, en este momento en el que estamos sumergidos en la jornada más importante de las Misiones que es el Domund , estas líneas escritas por el Asturiano dominico P. Miguel Angel Gullón

 

El milagro de la solidaridad

La noche del domingo 18 al lunes 19 de septiembre fue muy difícil y demasiado larga para los moradores de la región oriental y, más aún, para las Comunidades de la provincia de El Seibo. El huracán Fiona entró por el pueblo de pescadores de Boca de Yuma en categoría 2 a más de 160 Km. por hora con lluvias muy fuertes. Tardó más de lo habitual en amanecer y después se produjo una gran calma. Cuando parecía que ya se había acabado la pesadilla volvieron los vientos y los aguaceros con más fuerza, era el ojo del huracán que duró largo tiempo pues se movía a sólo 9 km. por hora transcurriendo como un molinillo por donde pasaba. Los daños materiales son cuantiosos e inevaluables: miles de viviendas descobijadas y tumbadas por completo; cientos de personas desplazadas de sus hogares; grandes áreas de cultivos destrozados: cacao, yuca, ñame, aguacate, mango, chinola, plátanos, etc. Sólo hubo que lamentar la muerte del Sr. Blas Cepeda por infarto al ver su casa destruida en Peña Blanca de Magarín. A destacar la importante labor de las autoridades y de los organismos de asistencia que lograron, tanto de forma presencial como a través de los consejos en Radio Seibo, convencer a las familias con el fin de que dejaran sus casas al lado de los ríos y en los lugares vulnerables para ser acogidos por sus familias o en los albergues.

Radio Seibo sufrió la fractura en varios tramos de su antena de FM, de 52 m. de altura, cayendo a la Avda. Libertad y al techo de la clínica de la Fundación Sonrisa. Por el impacto también se dañaron muchos paneles que dan la energía a la emisora. El proyecto de agricultura “Virgen de Covadonga” que tiene como objetivos la creación de fuentes de trabajo, ser escuela de formación y sostener la economía del Centro de Salud “Fr. Luis Oregui” también sufrió el embate de los fortísimos vientos: los 8 invernaderos de 1.000 m2 cada uno tienen dañadas sus estructuras metálicas y los techos-laterales destruidos. Las cosechas de ajíes, pepinos, tomates, etc., se perdieron por completo.

Los días siguientes fueron muy tristes porque se iban dando a conocer todos los destrozos en los campos más alejados de la provincia que hasta entonces habían permanecido incomunicados por la caída de los árboles, postes de la electricidad, crecidas de los ríos y caminos intransitables. Todo el mundo coincide en la siguiente reflexión: Fiona ha dejado al descubierto la inmensa pobreza que existe desde hace muchos años, ha corrido el telón que ocultaba a una provincia totalmente empobrecida por el acaparamiento de tierra y el monocultivo asfixiante que la ocupa.

Pronto salió con fuerza el arcoíris de la esperanza que hizo olvidar tanta destrucción. El huracán no podía tumbar tantos corazones y mentes solidarias que se unieron con el firme propósito de reconstruir lo que se había perdido. El milagro de la solidaridad emergió con una fuerza insospechada aliviando el dolor y sufrimiento de muchas familias que depositaron su confianza en el Dios de la vida. Este milagro ha sido posible gracias a muchas personas e instituciones que unieron esfuerzos para enviar alimentos, medicinas, materiales de construcción y, sobre todo, entretejieron lazos de amistad y gratuidad. En Santo Domingo, Santiago de los Caballeros y otras ciudades se constituyeron centros de acopio que después traían a El Seibo para compartir con las familias damnificadas. Ha vuelto a pasar la misma experiencia que se vivió hace 5 años con el huracán María: en el equipo de Radio Seybo se decide en el momento del desayuno el lugar donde se llevarán en la tarde las raciones alimenticias y la ropa; sucede que cuando se lleva todo lo que llegó a una comunidad, al día siguiente se llena el salón, pero cuando se deja algo entonces llega menos al otro día. Por eso, la solidaridad se multiplica y se contagia de la forma más bonita. La solidaridad es como la levadura que fermenta todo lo bueno que hay en las personas haciendo posible el paraíso soñado por todos: la fraternidad.