miércoles, 19 de marzo de 2014

NUEVAS NOTICIAS DEL P.JOSE DIAZ ,DESDE SU NUEVA MISION EN NICARAGUA


 Queridos amigos y amigas de las OMP de Oviedo:
Nuevamente unas líneas de afecto y cariño desde la Parroquia Santa Cruz, en Casares de Nicaragua,
Hoy los misioneros combonianos celebramos el aniversario de San Comboni durante la Cuaresma, donde todo en la Palabra nos llama a la conversión, a despertar del sueño, a dedicarnos a las obras de la luz. Comboni, hombre de fe, supo despertar y dejarse iluminar por Cristo, y también supo despertar el mundo que le rodeaba con su incansable y apasionada animación misionera.
Hoy, en el contexto de la celebración del décimo aniversario de su canonización, les escribo una breve reseña de mi estadía e invocar al Dios de la luz sobre cada uno de ustedes y sobre todos los pueblos que viven en la “sombra de la muerte” debido a las guerras, la injusticia, la pobreza y la opresión.
Cerca ya de un mes desde que he llegado a esta gran misión, toco más de cerca la realidad de estas comunidades que si bien es cierto ya tenía información directa por parte de misioneros que ya habían trabajado pastoralmente aquí, veo la situación más clara, más real? o tal vez más oscura…? Visitando la mayoría de las comunidades te conmueve tanta pobreza, y es que son comunidades muy necesitadas de todo , y digo de todo, ya que no es solo de lo material que también, sino que con mucha pena debo decirles, adolece de lo espiritual, pues la vivencia en la mayoría de las comunidades deja mucho que desear, sobre todo en la participación de los sacramentos, en especial de la Eucaristía y en el mantenimiento de la propias pequeñas capillas… construidas muchas de ellas con mucho esfuerzo por comunidades y misioneros muy fervorosos, y que ahora están un poquito descuidadas con necesidades de un buen mantenimiento; quisiera creer por falta de recursos y no tanto por el desinterés de las propias comunidades.
Prácticamente he visitado todas las once comunidades que componen nuestra parroquia de la santa Cruz, donde viven muy precariamente en casitas muy… pero muy pobres, ya que no tienen fuentes de trabajo estable…, tan solo tres pueblos o comunidades que mal viven con la pesca artesanal y el cuidado de algunas “quintas” de gente que viene los fines de semanada desde Managua.
En este tiempo he podido visitar como les digo, prácticamente todas… pues en el tiempo de la lluvias a partir del mes de mayo… tres de ellas no será posible por la crecida de los ríos, y el mal estado de los caminos, pue no son carreteras asfaltadas ni tienen puentes en los ríos; esto me hace pensar y así lo hablé con el párroco P. Carlos, de la necesidad de la formación de los agentes locales para que en nuestra ausencia continúen con la formación religiosa de los Jóvenes y niños y la animación los domingo de la Celebración de la Palabra.
Les cuento también, como curiosidad y para que visualicen nuestra realidad y de los que ustedes disfrutan como normal…, que aquí el agua potable nos llega como mucho, dos días a la semana unas horas al amanecer, en cuanto a la luz eléctrica, ya hemos tenidos tres cortes desde que llegué, dando gracia a Dios ya que llegando la noche aparece como por encanto; y qué decir del Internet, no siempre está disponible y cuando esta es de manera intermitente… El transporte de la gente de las comunidades del interior es por carretas tiradas por bueyes o mulos, en fin…denle gracias a Dios de lo que tienen y alábenlo por tantas bendiciones…
Impresionante es la historia de los últimos tal vez 12 años, donde me cuenta el P. Carlos, mi compañero en la Parroquia, que pasaron grandes misioneros Combonianos, trabajando con entusiasmo, entrega y generosidad y que sin embargo, los frutos que se ven son muy pequeños, al menos estas son mis primeras impresiones… Ciertamente los “protestantes, evangélicos” se mueven mucho…, de manera agresiva contra los católicos… diciendo toda clase de “sandeces” y mentiras, que la gente poco instruida, con pocos recursos y sobre todo poca formación religiosa, se lo creen todo; junto a ello les entrega de ropa y alimentos logrando captar de manera proselitista a mucha gente buena.
Vislumbro pues, un trabajo apostólico muy árido y frio, comparado con el que viví en Guatemala… tan gratificante, y de tantas bendiciones… donde las mismas comunidades te empujaban a no dormirte en los ·”laureles”, donde los Movimientos Eclesiales llenos del fuego del Espíritu Santo desarrollan sus trabajos apostólicos de manera pujante y rico en expresiones, en métodos y ciertamente con gran ardor misionero.
Recuerdo las palabras del papa Francisco, cuando dice que transmitir la fe en muchas partes del mundo es arduo y arriesgado, y que debemos ponernos en actitud de misión «para llamar a quienes se han alejado y fortalecer la fe, especialmente en los jóvenes y niños. Se ha de prestar continua el Papa Francisco, una atención particular al proceso de iniciación a la vida cristiana. La fe no es una mera herencia del pasado sino un regalo, un don que nace del encuentro personal con Jesús y de la aceptación libre y gozosa de la nueva vida que nos ofrece».
Ninguna inercia pues me digo, sino el entusiasmo de quien vuelve a asomarse a una misión de vanguardia, a un mundo a veces entristecido por la falta de horizonte y por la precariedad de tantas dificultades… para anunciar con sencillez y creatividad la Buena Noticia que es capaz de encender la luz y avivar la esperanza, desde luego con el apoyo de sus oraciones y si Dios lo permite, también económicamente, ya que hay también que rehabilitar capillas y centros de catequesis.
Bueno termino por donde tal vez tendría que haber empezado; Dando gracias a cada uno de ustedes, por vuestra amistad, vuestra preocupación por mí estando de salud y animo en esta nueva misión, llena de desafíos y retos y sobre todo quiero darles las gracias por vuestras oraciones que ciertamente son lo más importante. De salud, diría que mejor que en Guatemala… ya que desaparecieron los dolores de cabeza y el malestar estomacal que de cuando en cuando sentía.
Los ánimos muy altos… ya que “no es mi obra”, como decía nuestro fundador San Daniel Comboni… es la mima obra de Dios y él sabe muy bien cómo llevarla adelante.
En cuanto el tiempo, me refiero al clima… es muy caluroso estamos un promedio de 22 a 35 grados… pero en la noche la brisita del mar lo hace más llevadero.
Finalmente, contad con mi gratitud y el recuerdo diario ante el buen Dios, para que les siga bendiciendo.

Fraternalmente,